lunes, 31 de diciembre de 2007

Esas pequeñas cosas

El año 2007 llega a su fin. Han sido 365 días unos más intensos que otros, unos mejores que otros. Lo cierto es que si miramos alrededor el panorama no es muy alagüeño. La humanidad sigue inmersa en guerras, se sigue matando a gente por motivos de religión, por pensar diferente, por ser más débiles o por no poder soportar que alguien quiera vivir su vida sin tener que aguantar maltratos. El mundo también cambia su aspecto, cada vez hay menos naturaleza y más ladrillo y desierto, desaparecen miles de especies animales y vegetales todos los años y, al parecer, se está produciendo un cambio climático que nos va a afectar bastante a todos. Además, el hambre sigue siendo una lacra por erradicar en el mundo y los pobres cada vez son más pobres y los ricos cada vez más ricos.
Si lo pensamos bien, poco podemos hacer por cambiar estas cosas como individuos. Aunque bien mirado si que podemos hacer algo. Podemos poner nuestro grano de arena, haciendo que las cosas cotidianas vayan mejor. Podemos facilitar las cosas a quien tenemos al lado, ser amables, tener una sonrisa para aquellos que la necesitan, ser un apoyo para aquellos que nos piden ayuda. Así que empecemos el año intentando ser mejores nosotros mismos porque eso va a repercutir en los que nos rodean y va a hacer que estén mejor, ellos y nosotros. Hagamos que la cadena se haga lo más larga posible y alcance a cuanta más gente mejor.
Y a pesar de todo, seamos optimistas. Saquemos provecho a cada segundo de nuestras vidas, viajemos, leamos, riamos, besemos, abracemos. Disfrutemos de los paisajes, de los amaneceres y de las estrellas por la noche, de las ilusiones de los niños pequeños que tenemos cerca, escuchemos las historias de nuestros mayores. En fin, seamos conscientes de esas pequeñas cosas que parecen no tener importancia pero que al fin y al cabo son las que importan, porque hacen que al final del día podamos dormirnos con una sonrisa en los labios.
Que en este año que entra, todos disfrutemos de nuestros amigos, familiares y parejas. Que venga cargado de todos esas pequeños momentos que hacen que la vida, aunque en muchos momentos sea dura, valga la pena.

¡FELIZ AÑO NUEVO!

sábado, 29 de diciembre de 2007

Mira si yo te querré

de Luis Leante
"El hallazgo inesperado de una vieja fotografía hará que Montse Cambra, una doctora de cuarenta y cuatro años, abandone su Barcelona natal para buscar a su primer amor. Comienza así un viaje que la llevará hasta el Sáhara. El afán de supervivencia y la pasión de vivir de un pueblo olvidado en el desierto la ayudarán a descubrir su verdadero destino."

Me ha gustado:
La historia en sí me parece muy bonita, por como los sentimientos hacia una persona pueden mantenerse a través de los años y hacer que abandones todo para saber qué fue de esa persona a la que tanto quisiste. También me ha interesado el transfondo histórico en el que ocurren los hechos, los últimos días del Sáhara español y la Marcha Verde.

No me ha gustado:
Los continuos feed-backs que dificultan un poco la organización cronológica de los hechos.

La historia me ha parecido interesante desde el principio aunque no me ha enganchado lo suficiente. Quizá el principio promete mucho, pero luego no ha cumplido del todo lo que prometía. De todas formas recomendaría su lectura.

viernes, 28 de diciembre de 2007

Una más en la familia


Os presento a mi nueva prima. Se llama Elsa y fue el regalo que Papá Noel le dejó a mi prima Laura. Estamos muy contentos porque es el primer bebé de la familia en 22 años. Se nos cae la baba con ella. ¡¡A que es guapa!!

jueves, 27 de diciembre de 2007

Faro de esperanza

Mi barco ha quedado a la deriva tras una inesperada tormenta. Las nubes tapan las estrellas, el mar queda en calma y yo me encuentro perdido en el inmenso océano, con la oscuridad sobre mi cabeza. Sin rumbo. La tristeza empieza a entrar en mi corazón, como la humedad entra en los huesos y deja helada el alma.

De pronto la tenue luz de un faro aparece en el horizonte. ¿Será un espejismo?. Nada tengo que perder. Dirijo la proa de mi barco hacia la luz y observo que cada vez es más nítida y clara. No, parece que no es un espejismo, así que despliego las velas y mi barco avanza rápido sobre las olas.

Entonces, una duda me asalta. Quizá hay algo antes del faro, tal vez un islote o una roca. Sin embargo, ¿qué puedo hacer? Mi salvación depende de alcanzar la luz de aquel faro, aunque puede que deba dar un giro y esperar a que amanezca, pero ¿y si viene otra tormenta?

Decido dirigirme al faro y, al tiempo que avanzo intuyo una brisa que me acerca a él. Por mi estómago se pasea el miedo. El miedo a estrellarme con la roca, o a que el faro se apague. Pero aunque éste se apague, al menos sabré qué dirección he de seguir, y aunque naufrague lo haré persiguiendo lo que anhelaba.

Y, ¿quién sabe?, a lo mejor en cuanto amanezca pueda ver la costa. El lugar dónde atracar mi barco y descansar en su regazo hasta que vuelva a partir, o tal vez quedarme allí en la seguridad de la tierra y no volver a navegar.

Así que, si antes navegaba triste y sin rumbo, ahora lo hago decidido y con la bodega repleta de esperanza. Y esto si a alguien se lo debo es a ti.

...para mi luz en la noche, que nunca se apague.

martes, 25 de diciembre de 2007

BON NADAL

El Nadal es una època en la que també és tradicional escriure missatges als amics. Jo he tingut la sort de rebre uns quants d'amics molt volguts i que m'agradaria compartir amb tot el que vullga:

- "Dessitjar coses bones a la gent que estimem és el millor del Nadal... Amb tot el meu afecte, felicitat".
- "Que en estas fiestas disfrutes al máximo de tu familia con Amor, Paz y Armonía. ¡FELIZ NAVIDAD!"
- "Espere passes unes festes plenes d'alegria i felicitats. Bon Nadal."
- "En estos días te quiero desear lo mejor de lo mejor, porque te lo mereces... ¡Feliz Navidad!
- "Que disfrutes d'aquests dies amb els teus. Que ho passes molt bé i que vinguen carregats. BON NADAL!

Moltes gràcies a tots, sou genials.



domingo, 23 de diciembre de 2007

SALUT QUE TINGUEM

Un año más me quedo sin que me toque el Gordo. ¡Vaya mierda!. El único boleto con premio ha sido la papeleta de los bomberos de Xátiva. Bueno Gerardo, me debes 2,40 euros. Todo un dineral. Y eso que este año ha tocado algo en Xixona. Nada, otra vez será. SIGUE BUSCANDO

lunes, 10 de diciembre de 2007

Zaragoza, ciudad eterna


Se acabó el puente. Tanto tiempo esperando y ¡lo rápido que ha pasado! Sin embargo, ha dejado muy buenos momentos. Todos con un punto en común, Zaragoza.
Jueves 6 de diciembre: Día de la simpatía

Llegamos a la estación intermodal de Zaragoza y Enrique ya nos está esperando. Como se le suponía, ha hecho los deberes y nos lleva rápidamente al Hotel Meliá Zaragoza. Mientras, nos pone al día de cómo son las cosas en la ciudad. Bueno... más bien de como son las mañas: estrechas y secas (el autor de este blog no
se hace responsable de las opiniones de sus amigos. Tras dejar las maletas, nos lleva a dar nuestro primer paseo por las concurridas calles de Zaragoza comprobamos in situ la simpatía de las mañas en una cafetería donde todavía estaríamos esperando que viniesen a ver que queríamos, si al final, no nos hubiésemos levantado a pedir a la barra. A continuación, vemos la plaza de César Augusto, el Pilar y el puente de piedra, desde donde podemos tomar algunas fotos de la ciudad. Más tarde, cenamos en compañía de Antonio Gilipollas Caraculo, que nos amenizó bastante la noche, en "El sidecar". Tras la cena, salimos a dar una vuelta por la zona del Tubo y allí conocimos a una tierna jovencita en la puerta de un bar de copas, bueno... de chupitos. Finalmente, acabamos en el pub donde van todos los erasmus (no me acuerdo el nombre). Allí, las cervezas eran gratis pero claro, nosotros no lo sabíamos y fuimos los únicos del local que pedimos cubatas. ¡Novatos!
Viernes 7 de diciembre: El croisant, el M
onasterio de Piedra y los pinchazos
Hay días en los que es mejor no levantarse de la cama. Y si no, que se lo digan a Chilo, protagonista indiscutible del día (aunque Carlos también se llevó lo suyo). Ya me imagino a Chilo y a Enrique, mirando deseosos ese croisant, pidiéndolo y frotándose las manos esperando el festín. Imagino al camarero llevando pan, un plato humeante con algo grasiento, recubierto de más grasa (frita eso sí) y a Enrique diciendo "Ah, no son bollos". Casi puedo verlos tragarse dos o tres bocados de aquello, haciendo como si lo hubiesen pedido a cosa hecha. ¡Qué dolor! Después de eso nada podía ir peor, ¿no? La verdad es que el resto del día estuvo bastante bien. Visitamos el parque del Monasterio de Piedra, que para mí fue una de las cosas más bonitas del viaje con sus cascadas, árboles, vistas... Más tarde visitamos Calatayud, en especial su catedral, donde nos hizo una visita guiada "El hombre de Calatayud", un señor muy majo que nos dejó muy clarito qué cuadros y esculturas son valiosas y cuáles no valen nada, la diferencia entre oro (valioso) y pan de oro (no vale nada). También nos enseñó donde se rodó la película del camarote de los hermanos Marx; un sótano en el que hacen merendolas varias y donde caben 1000 personas (por turnos, claro). Por último, aprovechamos para hacer algunas compras de dulces típicos de la zona: frutas escarchadas cubiertas de chocolate, merengues, palmeritas de chocolate...
Pero claro, cuando empiezas el día zampándote un pegote de grasa con café con leche, algo más te tiene q
ue pasar. Así que cuando volvíamos hacia Zaragoza, el coche en el que iba Chilo pinchó y se encadenaron una serie de despropósitos. Primero no había llave para desatornillar la rueda, luego nadie contestaba en la casa de alquiler, el triángulo no se mantenía en pie, los camiones amenazaban con arrasarlo todo... Pero bueno, finalmente todos llegaron sanos y salvos. Más tarde, por la noche quien pinchó fue Carlos que acusó el desgaste de la excursión por el Monasterio de Piedra y fue arrastrándose por las calles de Zaragoza. Eso sí, nos acompañó al caballito a hacernos unas fotillos. Con un par.
NOTA: Mil gracias por el regalo. A pesar de la mala tarde, tuvisteis un detallazo.
Sábado 8 de diciembre de 2007: Cumpleaños feliz.
Empezamos el día haciendo frente al sueño pa
ra ir a visitar la Aljafería. Carlos y Paula no consiguen vencer a Morfeo y se quedan sobando... La visita al palacio es guiada y nos explican muy bien las distintas épocas por las que ha transcurrido su vida. Fue construido y habitado por primera vez por Abú Yafar, después fue residencia de los Reyes Católicos y ahora es la sede del gobierno Aragonés. Es una de las visitas más interesantes del viaje para mi.
Más tarde nos reunimos con Carlos y Paula para ir a comer unas migas al restaurante "La Miguería". La verdad es que comimos bien, como en todos los d
ías que estuvimos en Zaragoza. Por la tarde celebramos mi cumpleaños en la habitación del hotel con pasteles y cava. Tuve un regalo muy dulce por parte de todos y me contaron la "odisea" para comprarlo.
Cenamos de nuevo muy bien, en "La sidrería" y acabamos la noche de marcha por el tubo, como no podía ser de otra forma. Noche de fiesta en "El jardín del Temple".
Domingo 9 de diciembre: Despedi
das.
Es el último día en Zaragoza,
excepto para Enrique que se queda unos días más. Todavía aprovechamos la mañana para ir al teatro romano de Zaragoza. No se conserva tan bien como el de Mérida, pero tiene un museo donde explican cosas curiosas sobre cómo lo encontraron, qué otros edificios habían allí en distintas épocas y cómo se vestían los actores para representar las obras. También tienen varios audiovisuales con sonidos e imágenes que se podían oir y ver en las representaciones teatrales. Después de esto nos despedimos de Carlos y Paula que se fueron a coger el tren antes que el resto. Comimos en un bar donde nos ocurrió la ultima anécdota del viaje. Resulta que pedimos brochetas de buey y a la cocinera se le cayó la última ración al suelo. El camarero vino y nos lo explicó diciendonos que la "habían perdido" (la ración de buey). Yo entendí que la camarera se había caído y con ella la ración de buey, y que habían perdido a la camarera (que le había dado un mareo o algo). Nos reímos un rato de la película que me había montado y después salimos a toda prisa para coger el tren que, finalmente, no iba a traer de vuelta a Valencia.







domingo, 2 de diciembre de 2007

Serra de Bèrnia


Arribem en cotxe fins a Xaló, i allí, pel cami del cementiri agarrem la carretera que porta a Bérnia. És una serra amb l'aspecte de les crestes de l'esquena d'un drac. La pujada, al principi per una senda, ampla es complica poc a poc. El camí serpenteja per les fins arribar al Forat, lloc on ens espera una grata sorpresa, al menys per a mi (Toni ja ho havia vist, com sempre).
Un forat d'un metre d'alçada i dos d'amplura penetra a l'nterior de la roca per a, de repent, desembocar en un abric que actúa com a una pantalla panoràmica de la bahia d'Altea. Davant de nosaltres una vista excepcional: la serra Gelada, l'illeta de Benidorm, Altea...
Després de disfrutar del paissatge continuem, ara per l'altra cara de la serra fins arribar a un altre lloc característic: El fort. Es tracta d'una antiga atalaia que servia de torre de vigilància en l'època mitjeval. Ha sigut el lloc elegit.
Una vegada recuperades les forces continuem la nostra marxa ara molt més tranquila fins al cotxe.
PD. Una abraçada a les ruses que ens van alegrar el camí

sábado, 1 de diciembre de 2007

Viaje de amigos 2: Zaragoza

Tras el éxito cosechado con la primera entrega con Salamanca, vuelven algunos miembros de la peña Griinpis a viajar. Esta vez será Zaragoza la ciudad elegida para pasar el puente de la Constitución. Tras haber enviado a Enrique como avanzadilla, el resto del grupo se dispone a preparar el viaje a la capital aragonesa. La basílica, los caramelos del pilar, el monasterio de piedra y la zona del Tubo les esperan.
¿Qué nos deparará el futuro?¿Habrá hecho su trabajo Enrique en la búsqueda de los mejores tugurios y garitos? ¿Nos pelaremos de frío? ¿Tendré un cumpleaños tan genial como el del años pasado? Una cosa es segura. Habrá fiesta.

Pregunta para navegantes: Ayúdanos en nuestro viaje ¿Qué lugares especiales de Zaragoza conocéis?