miércoles, 29 de septiembre de 2010

El milagro de la vida.


No es fácil. Si lo piensas bien tienen que pasar tantas cosas, una detrás de la otra, casi sin error, que a veces resulta totalmente alucinante que esto haya ocurrido durante más de un millón de años.

Antes que nada hace falta que dos personas se conozcan y se quieran mucho. Tanto, que decidan unirse para siempre en la forma de otro ser, formado por la mitad de cada uno. Parece sencillo pero no lo es.

Después viene la otra parte, casi mágica que tiene lugar dentro de la madre. Desde el mismo momento en el que una intrépida célula con forma de renacuajo se introduce en un óvulo del tamaño de la punta de una aguja, una serie de divisiones, reacciones, uniones y transformaciones se producen una tras otra, sin descanso durante nueve meses formando tejidos, huesos, músculos y órganos hasta que un día, en el interior de la madre, deja de haber un corazón para haber dos. ¿Puede haber algo en nuestra vida mías parecido a un milagro? Para algunas personas es simplemente ciencia, pero, en ese caso, se trata de ciencia de la buena.

Un abrazo y un beso muy fuerte para los que ahora mismo deben ser dos de los papás más felices del mundo.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Huelga general 29 de septiembre

Los votantes han elegido la colección “Reclamos de pájaros” como la más extravagante de cuantas han aparecido este año en el mes de septiembre. Agradezco a todos vuestro voto.

Ahora es momento de una nueva encuesta. Durante esta quincena se va a tratar un asunto mucho más serio, la huelga general del 29 de septiembre. Al parecer existen diferentes puntos de vista al respecto sobre la conveniencia o no de participar en esta huelga. ¿Qué opinas?

miércoles, 15 de septiembre de 2010

La isla

Detuvimos la lancha bajo la refrescante sombra de la isla. Ella descansaba sosegada sobre las tranquilas aguas, a pocas millas de la bulliciosa ciudad y las gaviotas revoloteaban ruidosamente describiendo círculos sobre nuestras cabezas. Sobre el acantilado, los cormoranes miran al horizonte como si buscasen algo en la inmensidad del mar o esperaran la pronta llegada de algún visitante. Nos lanzamos al agua nadando hacia la roca, buscando buenos agarres para empezar la escalada, esperando un golpe de mar que nos aupara y nos ayudara a llegar más arriba. Ascendimos por sus faldas intentando no caer hasta donde nos permitió nuestra habilidad o nos llegaron nuestras fuerzas. Después nos dejamos caer, un refrescante chapuzón y vuelta a empezar. Esta vez más allá donde el sol del atardecer nos arropaba con su calidez. De nuevo arriba, esta vez hasta lo más alto entre los lentiscos y las chumberas, en un viaje clandestino que la isla, que nos miraba condescendiente, permitía. Desde arriba, el agua cristalina nos dejaba ver sus entrañas, hechas de roca, y el paso rápido de las castañuelas. Al levantar la vista hacia la lejanía pronto descubrimos lo que tiene maravillado a los cormoranes: la extraordinaria belleza de la plácida mar vista desde la isla.

Sin empleo, de Los Suaves

Mi amigo Ricardo nos proporciona la segunda entrega de Una canción, una historia. Se trata de “Sin empleo” de Los Suaves. En este caso no habla de una persona o de una familia en concreto, sino de una cualquiera entre las muchas que viven el drama del paro. Aunque el tema se escribió hace años, sigue estando tristemente de actualidad. Nos lo explica Ricardo:
Ací t'envie Sin Empleo, de Los Suaves. Crec que ja la coneixes. Per als temps que corren, una cançó de l'any 1982, però completament d'actualitat.
Relata com una família es queda "sin empleo", sense paro, sense poder alimentar a la família... i acaba suïcidant-se. Gràcies a deu (o a qui siga), actualment hi han més subsidis, més ajudes, etc. però la realitat és que si la cançó parla de "2 millones de parados", ara en són 4.

lunes, 13 de septiembre de 2010

La maestra que quería bailar

La sujeta A es maestra. Tiene plaza definitiva en el colegio público B y no acude a este centro desde hace dos años. El primero de ellos pidió una excedencia y el segundo una comisión de servicios en una escuela de adultos para poder compaginar su trabajo con el que, por lo visto, es su gran sueño o algo, la danza. Hasta aquí, nada que decir, todo dentro de los permisos que se conceden a los funcionarios de carrera. Sin embargo, algo queda flotando en el ambiente: ¿por que esta sujeta A no se ha dedicado a la danza en vez de a la enseñanza? Pero, bueno, a cualquiera pueden gustarle mucho, mucho dos cosas a la vez, ¿no?

Este año el monstruo de los recortes ha alcanzado el terreno abonado a las comisiones de servicios. Nuestra sujeta A esta apenada porque no le han dado la comisión y su carrera como bailarina, o lo que sea, pende de un hilo y no le sirve de consuelo que haya personas que cuidan a familiares enfermos de cáncer a los que se les ha negado el acercamiento de su trabajo a su hogar, por ejemplo.

Así que ella se ha puesto manos a la obra a perseguir su gran sueño. Ha presentado un escrito como que tiene a su abuela a su cargo para conseguir una reducción de jornada que va a utilizar para ir a la academia de danza, y no para cuidar a su abuelita, y los viernes por la tarde impartirá danza para la tercera edad (mira que es buena con los abuelitos, la propongo como próximo Nobel de la Paz) para sacarse un dinerito extra y no notar tanto la disminución de sueldo que acompaña a la reducción de jornada. De esta forma nuestra sujeta A no tendrá que abandonar su sueño y la danza española no perderá a semejante talento. Todo gracias a que no habrá ningún inspector ni semejante que se moleste en comprobar si se cumplen o no los requisitos por los que se conceden estos permisos.

¿A que es bonito? Si, a mi me también me gustan las historias que tienen un final feliz.

P.D. Mientras tanto, otras personas seguirán trabajando en condiciones bastante penosas porque les gusta su profesión, tienen decencia y vergüenza torera.